No hace mucho tiempo soñé contigo de nuevo. Trate de no ofuscarme, trate de ignorarte, pero vuelves de nuevo. Tengo una teoría de tu aparición repentina, pero no se sabe a ciencia cierta que haces en mis sueños.
Nunca fuiste sigiloso, nunca supiste esperar y cazar siempre ibas directo a matar recuerdo en muchas ocasiones que caminabamos juntos en los fríos paisajes donde yacían los cuerpos de todos los hombres que querían verte caer olía a muerte, la carne en estado putrefacto que se oscurecía al pasar de los dias y daba paso a colonias de larvas de mosca que apenas podían sobrevivir por la hostilidad del clima helado.
Esas tardes aunque fúnebres solían ser nuestros paseos y charlas mas sinceras solían ser nuestros momentos, pero aún hoy me pregunto ¿a que vuelves?
Mi lado ya no es tu lugar he brincado a otro mundo donde la guerra solo implica estar rodeada de críos y un esposo que atender mi vida aunque monótona es tranquila y pacífica.
A veces tengo sueños vanales sin sentido pero este último ha sobrepasado los últimos dos años. Vuelves con entrada triunfal me sacas de nuevo al campo tomas mi mano y me obligas a mirar tu rostro (aquel que alguna vez jure olvidar) mi cuerpo se enciende poco a poco y la locura de tus ojos me es irresistiblemente tentadora pero algo cambió, ya no veo el fuego ese que ardía, ese odio, esa rabia...
¿Acaso has dejado algo atrás también?
Me es un misterio aun tu visita inesperada, quizá sabes que necesito a alguien que me conozca tan bien como tu, y no voy a mentirte me siento vulnerable...
Sea lo que sea me alegro que hayas vuelto...
