8.07.2007

El primer intento…

La mayor parte del tiempo cuando intento escribir algo referente a ti, se me traban todas las posibilidades de palabras, no lo puedo explicar es como si dentro, cada vez que quiero expresar algo que piense, que sienta o si quiero comunicarte algo muy importante, algo estuviera amarrando el conducto de mi conciencia, ligando el flujo de mis ideas, así que de repente se me vienen como torrentes, tal es el caso de hoy, no puedo explicar que tratado esta hecho para ti y para mi, no puedo ni siquiera mirar al sol pues ya no tengo las burbujas que antes poseía en la pupilas de mis ojos…

Eres difícil de leer y fácil de explicar, hay controversia para narrar este partido que sin duda alguna el comienzo ha sido una buena herramienta de discusión.

Hasta donde llega el trabismo de mi garganta? que no hay ocasión en que te vea a los ojos y mi epiglotis comienza a volverse loca y no sabe si dejar pasar el aire o la saliva…

He descubierto la mejor manera de llegar hasta la línea que aparta esa extrema indiferencia tuya de mi, solo pienso y quiero, río y me tiro al suelo envuelta en carcajadas sin una explicación lógica, y justo cuando creo que ya no me estas viendo, me encuentro con la asombrosa sorpresa de esa fijación tuya en mi cuerpo desnudo; mantente alejado y no te digo más; mas si acercarte quieres corre bajo tu propio riesgo de contagio ilógico e iridiscente de mi posición universal externa o sea la locura.

Con años y años de experiencia, puedo presumir la teoría de la relatividad, sí, esa como decir que el tiempo es relativo… o el amor es relativo incluso la verdad y la mismísima mentira, manivela de todos los pecados, ella misma es relativa, y aun así queda un pequeño hueco entre ellas dos, como un punto medio de ebullición. Cuando de pronto me doy cuenta de la incoherencia de mis palabras, y despierto a un lado tuyo con todas las de ganar, beso tu frente y el trabismo invade de nuevo mi pensar, cuando abres tus ojos no puedo manejar a mi antojo mi epiglotis y comienza a brincotear, en ocasiones creo que es algo misterioso, como si tu así lo pidieras, un instante de silencio en mi parlanchina compañía no es mucho pedir según tus expectativas…

Un silencio asombroso invade mi cerebro, ni veo mis palabras, ni escucho tus pensamientos, excavo lejos, muy lejos, dentro muy dentro, profundo pero no tanto para no tocar el nervio central del misterio de tu vida, me acerco pero no tanto, cuestiono, pero mas al aire que a ti, es impresionante la forma en que, cuando me miras puedes hacerme un nudo y luego diluirlo como agua al azúcar en cuanto me sonríes.

Te huelo a lo lejos, te respiro en retazos, te culpo de tu indiscreción, y quiero comerte sin dilemas, sin inhibiciones, sin mas que decir que los mismos actos hablen, y que ni me atosigue el deseo de tenerte cuando estés despierto para no ahogar el pequeño imperio de nubes en el que me encuentro a tu lado.

A lo que tenemos y a lo que me doy de ti no se encuentra en un altar, es mas ni siquiera lo puedo adornar con flores, no lo veo, ni lo palpo, no lo espero con emoción, ni siquiera le puedo rezar todas las noches, no le entiendo, solo esta ahí, a veces se esconde bajo las faldas de ilusión, y me pica las costillas como un travieso fantasmilla…

Y de nuevo a las andadas, divagar sin especificar el motivo del escrito, es traumático, casi ilógico, es molesto, pero la exclusividad nadie te la quita, no te puedo describir en el mundo real mucho menos escribir de ti sin caer en el trabalenguas en el que no puedo pronunciar solo sentir…

Es el sentido más complicado el que ahora le encuentro a la espectacular manera de pensarte, de nuevo te miro a los ojos, de nuevo los abres pero ahora tienen un brillo diferente, verde y radiante que me hace brincotear de gusto pensando como si en un millón de años mis sentidos se desvanecieran en el tiempo y después de mucho al percibir el calor emanado de tus pupilas dilatadas mis signos de razonamiento respondieron a tus ondas electromagnéticas que disipan mi criterio universal , pero no te lo digo, solo lo puedes ver si lo quieres ver.

A lo largo de los días, puedes tenerme, pero no te tengo, ahora el miedo me invade, y la ilusión ilusoria me dice de ti, mi fantástico trabalenguas, lo repite y me hace llorar, abres y cierras, limpias y ensucias, a veces siento que me pica en el cerebro tu enojo, a veces no me dejas ver quien soy, quiero amarte sin perderte, quiero perderte para que te encuentre de nuevo, mira mis ojos ahora , donde están? en tu mente o tu corazón?, en donde se encuentra todo? es justamente 7 horas antes de llegar, tiemblo y tirito, y justamente ahora abro los ojos tu mirada es igual, mas no tan dulce, me reclaman tus ojos, cuanto tiempo voy a estar mirándote…

Vuelve en mi la indiscutible respuesta buscada, te quiero si es así como lo quieres, pero te busco en la mas remota tierra de mis alejados pensamientos y me doy cuenta que te has adelantado a los hechos, ves como haz fugaz, dentro en el área local de mi corazón, así de ridícula puedo ser, así de ataviada, y de ingenua, me ves y me transparentas, y aun después del tiempo de espera, no puedo mirar al interior sin que mi trabismo se presente…

No se en términos poéticos como dejar de verte, al final, las palabras hablan, ríen, lloran, gritan, se expresan por si solas, y me muerden detrás de la cabeza, para que mi lengua se trabe en tu mirada…

No hay comentarios:

Palabras de mi

  Hoy he perdido la noción del tiempo, del espacio y de las palabras y soy esclavo de ellas he descubierto que a pesar de poder expresarl...